Esas manitos...
son muy pequeñitas,
no me canso de observarlas,
tan frágiles, tan suaves,
torpes y delicadas,
todo a la vez.
Esas piernitas
que no cesan de moverse,
de aquí para allá,
corren, corren y se cansan.
Tu boca...
llena de los colores de mis mañanas,
no quevo, tila, achui,no peine, uca poné,
perdón, gracias, de nava.
¡Ay ! ¡Si pudiera
conservar este tiempo
en un frasquito dentro de mi alma!
¡MUY LIINDO!
ResponderEliminar